En busca del lobo

Un geólogo describe su aventura intentando ver lobos salvajes en el bosque

A veces los libros que menos te esperas te atrapan. Es lo que me ha pasado con Aullando en los Bosques, del periodista y geólogo noruego Reidar Müller (Editorial Lumen). El libro llegó a la redacción y, sin tener ninguna referencia ni de la obra ni del autor, lo abrí. Y lo devoré. O puede que no. Quizás me devoró él a mí porque desde que lo terminé creo haber comenzado a sufrir la misma obsesión que el autor: los lobos.

Müller explica en su libro como poco a poco se empieza a interesar por este mamífero y como desea verlo en libertad. El autor pasa del interés a la fascinación para acabar casi acariciando la obsesión. Necesita ver lobos salvajes, aunque sea un segundo, una sola sombra en medio de la oscuridad. El lobo es, posiblemente, el animal más perseguido por el hombre. La humanidad le acusó de atacar al ganado y a las personas e incluso de ser maligno y le condenó. «Hace tiempo se hizo un estudio en Suecia y Noruega centrado en los encuentros entre seres humanos y lobos y en 123 casos de un total de 125 el lobo huyó. Sólo en dos ocasiones no huyó: en una se trató de una hembra alfa que defendió, sin agredir, sus cachorros «, dice el autor. Pero eso da igual. El hombre lo ha perseguido por todas partes durante miles de años para matar a cuantos más ejemplares mejor. Si aún quedan ejemplares vivos es porque con el paso de los años, el lobo ha aprendido a huir del hombre. A alejarse de la muerte. De manera que los canis lupus que aún quedan en Escandinavia no le pondrán ninguna facilidad al autor para que cumpla su propósito. Eso sí, Müller recibirá la ayuda de «el hombre de los lobos», Stefan, un sueco famoso por haber tenido más de 200 encuentros con lobos. Todo un personaje que un buen día descubrió que prefería dedicar su tiempo libre a buscar estos carnívoros por los fríos bosques del norte de Europa que ir a hacer unas cañas con los amigos.

Mientras caminan entre pinos y abetos siguiendo las huellas que los lobos han dejado en la nieve, los dos hombres también topan con cazadores que, como su nombre indica, son violentos, van armados y odian a los lobos y a todos aquellos que los aman . Así que en un par de ocasiones les toca huir por piernas. Pero no se rinden. La necesidad de ver a los lobos es tan intensa que no se pueden rendir. Llegan a pasar toda una noche inmóviles en medio del bosque mientras rompen el silencio con fuertes aullidos esperando que algún lobo se sume. Esperando la respuesta en medio de la noche.

El libro está ampliamente documentado y no sólo encontramos historias de lobos sino también de vegetación. Müller interrumpe la descripción de su obsesiva búsqueda para describirnos como es la taiga, de qué árboles está formada y cuál es su historia. Estas incursiones ralentizan el relato pero también le aportan mucha riqueza. Bien mirado, los árboles son los que más tiempo llevan en la tierra. Müller nos cuenta, por ejemplo que «el abeto pertenece a la familia de las plantas de semillas desnudas que surgieron hace un poco más de 300 millones de años».

Entre la historia de los árboles, la confrontación entre el mundo rural y el urbano, el autor intentará sin descanso ver a algún lobo. Lo conseguirá? O al menos los oirá aullar? Si lo queréis saber, tendréis que comprar el libro porqué no pienso hacer ningún spoiler.

El 81,3% de las personas consideran que los correbous son maltrato animal

La plataforma Prou Correbous ha explicado en su acto de presentación en Amposta los resultados de una encuesta de opinión sobre el grado de aceptación de los correbous en Cataluña.

Diversos miembros y simpatizantes de Prou Correbous estuvieron presentes en la tarde del 29 de enero en la Plaça del Castell de Amposta para presentar esta nueva plataforma en el municipio tarraconense. Este grupo animalista, que está formado por nueve entidades de protección animal de Cataluña, tiene como objetivo acabar con los espectáculos taurinos en el territorio catalán.

En el acto, la plataforma explicó los resultados de una encuesta de opinión realizada el pasado mes de noviembre a 600 personas mayores de edad de Cataluña. La encuesta fue encargada al Institut Opinòmetre, gracias al soporte de entidades como la Humane Society, CAS Internacional, PETA y la fundación Franz Weber. Los resultados de esta consulta han sido calificados por Prou Correbous como “extraordinarios y “decisivos” para abordar el fin de los correbous.

Sobre la cuestión… ¿Considera que las fiestas populares conocidas como correbous los animales son maltratos y sufren? Los resultados han sido muy claros, el 81,3% considera que sí, es decir, cuatro de cada cinco personas creen que los espectáculos con toros son maltrato animal. La consideración de que los animales sufren maltrato durante los correbous ha incrementado en un 5,8% con respecto a los resultados de una encuesta muy similar realizada en 2012 desde SIGMADOS.

Otro de los resultados que recoge la encuesta es el grado de aceptación por parte de los ciudadanos sobre que las administraciones destinen dinero público para la celebración de estos espectáculos. El 85,5% las personas que respondieron a esta pregunta se mostraron en contra de esta situación.

La tercera temática importante que ha abordado este cuestionario es si la persona encuestada está de acuerdo con que el Parlament de Catalunya prohíba los correbous. La respuesta más votada ha sido el SI, con un 75%. En toda Cataluña, solo un 13,2% de las personas encuestadas rechazaría una hipotética prohibición.

Tras los resultados de la encuesta, Prou Correbous ha obtenido unas conclusiones claras: “Cataluña no solo no se identifica con estos espectáculos a los que atribuye maltrato animal, sino que una gran mayoría estaría a favor de que el Parlament los prohibiera”.

Recordemos que la plataforma Correbous está integrada por las siguientes entidades de protección animal: ADDA, FAADA, AnimaNaturalis, Fundació Fauna, Libera, Fundación Franz Weber, Lex Ànima, AVDA y Tots Som Poble. El grupo realizó su presentación oficial el pasado 15 de enero en la Plaça Sant Jaume de Barcelona.

Descubre las 7 verdades de Ecologistas en Acción sobre el impacto de la caza

La caza es uno de los temas de actualidad en España. Existen muchas discrepancias en la sociedad sobre la necesidad de existencia de esta actividad. Los que están a favor de ella, defienden que la actividad cinegética es una tradición del país, que los cazadores invierten dinero para mantener la naturaleza, que concede muchos puestos de trabajo en las poblaciones rurales y que es el tercer deporte con más licencias federativas en el territorio español.

Para otros muchos, la caza es una actividad que consiste en matar animales ya sea por negocio o por diversión. La realidad acerca de la actividad cinegética es muy diferente a la que nos quieren mostrar los defensores de la caza. Por este motivo, Ecologistas en Acción ha elaborado un informe en el que desenmascara las verdades ocultas tras la buena imagen que pretenden transmitir. Dicho informe, recibe el nombre de “7 verdades sobre el impacto de la caza en España”.

La caza consiste en matar animales por diversión o negocio

La primera verdad que expone el informe de Ecologistas en Acción habla acerca de la finalidad de la caza en los tiempos actuales. Si bien es cierto que hace ya varias décadas la actividad cinegética era un medio de subsistencia, hace muchos años que su empleo se basa en cuestiones de diversión o negocio.

Cuando hablamos de diversión hacemos referencia a lo que los cazadores llaman deporte. Pero tal y como dice el informe, es una práctica que prima exhibir el mayor número de piezas cobradas y los mejores trofeos.

En el apartado económico, es cierto que cada vez hay menos cazadores, pero el lobby que conforma la caza es muy sólido. El informe detalla que no existen estudios oficiales completos sobre el volumen de dinero que mueve esta actividad. La única revisión completa es de iniciativa privada (Fundación FAES 2007) que cifra los beneficios en más de 2.750 millones de euro.

La caza no es compatible con la conservación de la biodiversidad

Esta es una de las grandes mentiras que defienden los seguidores de la caza, y así lo demuestra el informe. Según las estadísticas oficiales (MAGRAMA 2013 y datos propios) mueren cada año del orden de 25 millones de animales a causa de la actividad cinegética.

Hay que tener en cuenta que la caza no tiene pausa. Existen algunas reglas que acotan espacios y tiempos concretos para esta actividad, pero la realidad es que, ante la falta de control y de normativas sólidas, la caza tiene lugar a lo largo de todo el año y en prácticamente todos los lugares que quiera el cazador. Parques nacionales como los de Cabañeros y Monfragüe sufren la caza durante todo el año a pesar de que la actividad está considerada incompatible con la conservación de estos ecosistemas.

Por otro lado, hay que destacar como la caza amenaza a los animales que están en peligro de extinción. Prácticas propias de la actividad cinegética, como el uso de venenos o el disparo directo, amenaza la supervivencia de especies como el oso pardo o el lince ibérico.

La caza convierte los cotos en granjas intensivas y en campos de tiro

El informe explica que la caza cada vez se centra en más animales criados en granjas y liberados en los cotos para su captura inmediata. Según Ecologistas en Acción, la actividad intensiva y comercial, supone graves desequilibrios en los ecosistemas desplazando y dañando a las poblaciones autóctonas.

Un ejemplo claro es el de la perdiz, cuya caza se ha intensificado en los cotos a lo largo de los últimos años. La intensificación de la caza de estos animales está asociada a la aparición de efectos muy nocivos sobre nuestra biodiversidad tales como la introducción de híbridos de perdiz autóctona con chukar que contaminan genéticamente y desplazan a los ejemplares autóctonos.

La caza no sirve para gestionar la fauna ni para controlar sobrepoblaciones

La mayoría de los cazadores defienden su actividad bajo el argumento del control de sobrepoblaciones como la del jabalí o la del conejo, entre otras. El informe demuestra que esto no es así. En una sentencia del Tribunal Supremo se detalló que está en la naturaleza de las cosas que la caza y  la pesca, lejos de servir a los fines de erradicación de las especies catalogadas como exóticas o invasoras, más bien determinan su mantenimiento indefinido, cuando no la agravación, del status quo actual, dificultando o haciendo imposible su erradicación, que es un objetivo inequívoco de la Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad.

La caza limita los derechos de la mayoría de los ciudadanos

La Constitución Española reconoce el derecho a todas las personas al disfrute del medio ambiente. Sin embargo, las consecuencias de la caza son muchas sobre el bienestar del medio ambiente. El informe recoge algunas de las numerosas situaciones que ya han denunciado todo tipo de colectivos y entidades y que atentan al derecho de disfrute.  Las denuncias afectan al corte de caminos públicos, cauces o de vías pecuarias, a permitir que la caza sea aprovechamiento preferente en montes públicos e incluso en espacios protegidos o al intento de sancionar posibles molestias involuntarias a las especies de caza.

La caza no favorece el desarrollo rural, perjudica a otras muchas actividades

Ecologistas en Acción desenmascara otra de las grandes mentiras de la caza, el beneficio en el desarrollo rural. La realidad es que la actividad cinegética, más que favorecer, puede causar muchas molestias sobre cualquier actividad pública realizada por no cazadores. Actividades como el senderismo o la fotografía se ven afectadas por la caza.

Además, el informe comparte un estudio publicado sobre los montes andaluces en el que se explica que las actividades de autoconsumo ambiental, uso recreativo y conservación de la biodiversidad amenazada son más rentables que la caza en términos económicos”. Por tanto, la actividad cinegética es minoritaria en la contribución al desarrollo.

La caza no solo mata, también maltrata

La última verdad que desvela el informe sobre la caza explica una evidencia de cómo esta actividad no respeta los principios más elementales del bienestar animal. Uno de los animales más castigados por la actividad cinegética son los galgos. Unos 50.000 galgos son abandonados al finalizar la temporada de caza, otro muchos, directamente son asesinados con escalofriantes métodos como el ahorco o lanzados a un pozo.

Por último, Ecologistas en Acción explican como la mayor parte de las normativas cinegéticas consideran a los perros y gatos abandonados objeto de captura por parte de los cazadores mediante disparo o trampas. Una barbaridad que demuestra la falta de escrúpulos por parte de los aficionados a esta actividad.

Aquí puedes leer el informe de “7 verdades sobre el impacto de la caza en España”: https://www.ecologistasenaccion.org/33187/

La policía rescata a 270 perros en condiciones lamentables de dos criaderos ilegales

La policía ha desmantelado una banda que criaba a chihuahuas y pomeranias de manera ilegal en Arganda y Meco, dos localidades de Madrid.

La Policía Nacional rescató en la mañana del 23 de enero a 270 perros de dos criaderos ilegales de Meco y Arganda del Rey. Los animales se encontraban en un pequeño zulo ubicado en el sótano de una vivienda particular en la que se criaban canes y se preparaban para su posterior venta. La organización criminal pudo ganar más de dos millones con esta actividad ilegal. Las autoridades detuvieron a cinco personas: los dos cabecillas, dos veterinarios y un informático, quienes han sido acusados de organización criminal y maltrato animal.

Según la información compartida por la policía, el criadero ilegal no disponía de las condiciones higiénicas y de habitabilidad necesarias para tener a los animales. De hecho, gran parte de las hembras presentaban numerosas infecciones debido a que los animales no tenían ningún control veterinario. Lamentablemente, a causa de la falta de cuidados los agentes encontraron dos crías muertas envueltas en papel de periódico.

Los chihuahuas rescatados estaban en unas condiciones lamentables. Los cuerpos de la autoridad han explicado que los perros tenían mutiladas las cuerdas vocales para evitar que ladrasen y pudieran alertar así a los vecinos de la zona. Además, las hembras habían sido explotadas para que tuvieran cachorros en gran cantidad y poder hacer con ellos negocio a gran escala.

Adolfo, uno de los detenidos de la organización criminal, ha hablado para el programa Madrid Directo de TeleMadrid y ha declarado que: “Los animales no estaban maltratados, cada día sacábamos a todos los perros por turnos. Yo estaba preparado para cuidar a los animales. Un biberón se lo puede dar cualquiera, no hace falta tener una carrera para hacerlo. Los perros estaban limpios y bien atendidos, comían alta gama y tenían todo lo que necesitaban. Lo único que hecho mal es que desde la ley de 2017 el sitio no era legal, pero no me ha dado tiempo a sacar los papeles. Nunca he maltratado a los animales”.

Sobre la mutilación de las cuerdas vocales de los chihuahuas Adolfo se ha defendido diciendo que: “Yo he comprado perros que venían así, muchos venían así. Para quá los voy a mutilar yo si desde aquí nadie oye, ya puedes dar voces que desde aquí nadie nos oye. Tengo la conciencia tranquila porque nunca he maltratado a ningún animal y nadie puede decir otra cosa”.

El Partido Animalista ya denunció la existencia de este criadero ilegal gracias a las informaciones recibidas por una persona anónima. Tras rescatar a los 270 perros, varias protectoras de la Comunidad de Madrid se han hecho cargo de los chihuahuas y de los pomeranias. Los animales se encuentran a disposición judicial, por lo que no pueden ser adoptados hasta que se celebre el juicio y se de una sentencia.

Los Halcones, vigilantes de los aeropuertos dese hace más de cincuenta años

Los halcones son unas aves extraordinarias. Estos animales tienen unas alas cónicas y finas, que les permiten volar a una gran velocidad y cambiar de dirección rápidamente y con mucha facilidad. Además, disponen de una sensacional agudeza visual que se ha medido en 2,6 veces la de un ser humano. Estas características han hecho que los halcones tengan una función muy importante: proteger a las aves de los aeropuertos y garantizar la seguridad aeronáutica. Esta es una de las tantas labores que los animales hacen por los seres humanos y que la mayoría de las personas ignoramos.

Alfonso Arisó es responsable del servicio de control de fauna del aeropuerto de Barcelona. Alfonso suma más de veinte años dirigiendo el servicio de cetrería, una tradición milenaria que previene los accidentes entre aviones y aves. Hablamos con Alfonso para conocer con detalle el funcionamiento de los halcones como protectores de la fauna del cielo.

¿Cuál es la función que desarrollan los halcones en los aeropuertos? ¿Qué es la cetrería?

-El uso de los halcones permite conciliar la conservación de la fauna de los ecosistemas aeroportuarios con la seguridad aeronáutica. Gracias a la presencia de estos animales, el resto de aves evita sobrevolar el aeropuerto y no cruza su trayectoria con la de los aviones. Aplicamos la cetrería de una manera intensiva y continuada en un determinado espacio, tal es el caso del campo de vuelo del Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat.

La cetrería es un antiquísimo e ingenioso sistema de caza, de los primeros que se inventaron, su antigüedad data de 1.400 A.C. Esta técnica, que ha variado muy poco a través de los siglos, ha evolucionado de ser un medio para la captura de animales para la alimentación del ser humano, inalcanzable de otro modo antes del descubrimiento de la pólvora, a lo que es en la actualidad, una noble arte de caza (Patrimonio de la Humanidad por la Unesco) y, por otra parte, en su aplicación práctica, un eficaz método de dispersión y control de aves en aeropuertos, sostenible y respetuoso con las especies a dispersar.

¿Conocemos el origen de esta práctica en España?

-En España el empleo de halcones en aeropuertos se remonta a abril de 1968, cuando el Dr. Félix Rodríguez de la Fuente, eminente halconero y naturalista, propuso el empleo de halcones en la base aérea de Torrejón de Ardoz, con el fin de expulsar a los sisones, una especie esteparia de tamaño medio que solía colisionar con los aviones de combate en sus maniobras de aterrizaje y despegue.  El éxito fue tal que en 1970 la operación se trasladó al aeropuerto de Madrid-Barajas, para posteriormente irse implementando en la práctica total de los aeropuertos españoles de la red de Aena. En el aeropuerto de Barcelona el servicio de control de fauna se instauró en 1996, continuando su labor en la actualidad.

Halcones durante el proceso de dispersión de aves

¿Todas las especies de halcones son válidas para la cetrería?

-Las principales especies y razas de halcones (gerifalte, peregrino, sacre y lanario), convenientemente adiestradas son aptas para la cetrería, y por tanto para la función de dispersión de fauna. A estas especies hay que añadir los híbridos obtenidos mediante la cría en cautividad, principalmente los cruces entre halcón gerifalte y halcón peregrino, y de estos dos también con el halcón sacre. Los híbridos tienen la particularidad de combinar la potencia y la talla del halcón gerifalte, especie adaptada al medio ártico y a sus duras condiciones, con la rusticidad y adaptación a nuestras latitudes de halcón peregrino y halcón sacre.

Las características de cada ejemplar según su especie, hibridaje o sexo determinarán su idoneidad para la dispersión de una u otra de las especies de aves presentes en el aeropuerto. Así por ejemplo, los halcones ligeros como los machos de halcón peregrino resultan adecuados para la dispersión de aves pequeñas y gregarias como estorninos, vencejos o avefrías, y los híbridos de gerifalte y peregrino son idóneos para la dispersión de aves de mayor porte como patos, gaviotas o garzas.

¿Qué habilidades permiten a los halcones desarrollar la función de protectores de la fauna del cielo?

-Su posición en la cúspide de la pirámide ecológica en su función de especializados ornitófagos les otorga un dominio de los ecosistemas en los que se encuentra. Y por otro lado, la propia nobleza de los halcones que nos permite a los halconeros adiestrarlos mediante técnicas de cetrería. Una vez adiestrados trasladan estas capacidades y su efecto atemorizante sobre las especies de aves que pretendemos dispersar cuando cruzan o tratan de asentarse en el campo de vuelo del aeropuerto. En el caso de Barcelona, estos vuelos continuados sobre el cielo del aeropuerto logra “educar” a las aves para que eviten el espacio del aeropuerto, acantonándolas en las áreas de la Reserva del Delta de Llobregat, convenientemente alejadas del área de maniobras de los aviones.

Alfonso Arisó junto a tres halcones durante una jornada de trabajo en el aeropuerto

¿Cómo entrenan los halcones su labor en los aeropuertos?

-El adiestramiento de los halcones del equipo de cetrería se realiza íntegramente en el propio aeropuerto a cargo de nuestros propios halconeros. Es un proceso delicado y paciente que culmina cuando el halcón es operativo para dispersar las aves. Nuestros halcones pueden actuar en presencia de aves procediendo a su dispersión inmediata, o de manera preventiva, simplemente en vuelo de marcaje. Nuestro sistema consiste en hacer volar a los halcones con la mayor frecuencia posible y el mayor número de zonas del aeropuerto.

¿Cuántos halcones hay trabajando actualmente en el aeropuerto de Barcelona?

-El equipo de cetrería del aeropuerto de Barcelona consta de 45 halcones divididos en tres equipos asignados a tres zonas del aeropuerto. Cada halconero, o técnico del servicio de control de fauna, gestiona su grupo de halcones y cada halcón actúa en la misma franja horaria durante todo el año. Los halcones los obtenemos de nuestro propio centro de cría en cautividad de halcones desde 1991, donde reproducimos anualmente más de cien ejemplares, y que nos permite seleccionar aquellos especímenes con las mejores características para la dispersión y la protección de las aves que circulan por el aeropuerto de Barcelona.