Resolución histórica y pionera: un juzgado ordena medidas cautelares para proteger el bienestar de una colonia de gatos de El Vendrell

Resolución pionera en favor de una colonia felina de El Vendrell que corría riesgo vital ante la pasividad y la irresponsabilidad legal del ayuntamiento.

Resolución histórica para el bienestar animal. La Fundación FAADA ha logrado un avance legal muy importante en la protección y el bienestar de una colonia de gatos en El Vendrell, Tarragona. Desde el año 2021, la entidad animalista ha estado trabajando para rescatar y asegurar el cuidado adecuado de estos animales ubicados en un terreno privado de dicha localidad.

Inicialmente, FAADA solicitó al Ayuntamiento de El Vendrell que tomara medidas para asegurar el bienestar de la colonia, pero el consistorio determinó que los gatos no eran comunitarios y que la responsabilidad recaía en el propietario del terreno. A pesar de esto, el Ayuntamiento seguía teniendo la competencia de intervenir si se detectaban situaciones de maltrato o abandono, como la falta de atención veterinaria, alimentación o identificación de los animales.

Debido a enfermedades y envenenamiento, desde 2021 la colonia se fue reduciendo de 70 a 50 miembros. En enero de 2024, ante la inactividad del Ayuntamiento, FAADA inició un procedimiento contencioso-administrativo para obligar al Ayuntamiento a actuar. La fundación solicitó medidas cautelares urgentes, incluyendo la esterilización, atención veterinaria y reubicación de la colonia en un lugar adecuado, contando con el apoyo de entidades locales especializadas.

Finalmente, el juzgado ha emitido una resolución histórica que reconoce la necesidad de adoptar estas medidas cautelares para proteger a la colonia. La jueza ha dictaminado que, en caso de no adoptarse estas medidas, los gatos correrán un riesgo vital y el procedimiento judicial perdería su finalidad legítima.

Además, la resolución subraya que la administración ha incumplido sus responsabilidades legales al no proporcionar los cuidados necesarios a los animales, reconociendo textualmente que el Ayuntamiento de El Vendrell, «está haciendo una auténtica dejación de las funciones que legalmente le corresponden en la gestión de dicha colonia al no llevar a cabo las actuaciones de esterilización, procura de tratamientos y curas veterinarias de los animales, alimentación de los mismos, con el consiguiente fallecimiento de los animales por conductas caníbales de otros individuos de la especie, y su traslado y reubicación a un lugar adecuado para dichos animales ferales».

Todo ello ha sido posible gracias a la profesionalidad y diligencia de Marc Vilar, abogado experto en derecho administrativo, quien colabora estrechamente con FAADA, y Anna Estarán letrada de la fundación especializada en derecho animal. La extraordinaria labor y dedicación de ambos han sido fundamentales para lograr este avance histórico.

Tal y como indica Anna Estarán: «Desde FAADA queremos agradecer profundamente a la jueza su sensibilidad y comprensión de la necesidad urgente de esta medida. Celebramos este avance significativo en la protección de los derechos de los animales, que no solo beneficiará a la colonia de gatos de El Vendrell, sino que también puede servir como referencia para futuras situaciones similares en toda España. Este logro nos motiva a seguir luchando por la protección y el bienestar de todos los animales».

Y la lechuza se dejó ver

Crónica de un taller de rapaces nocturnas en el Ebro 

Sólo se organiza una vez al año y, si nos guiamos por el público, es todo un éxito porque muchos repiten. Del grupo de 10 personas que hemos venido hasta el Delta del Ebro para conocer un poco mejor las rapaces nocturnas, hay tres que ya han venido otras ediciones. «El año pasado terminamos a las dos de la madrugada y vimos muchos búhos», explica una de ellas confiada en que este año se repita la historia.

El taller lo organiza la asociación Picampall y cuesta cinco euros. Empieza a las diez de la mañana en el Casal de Joves de L’Aldea (Baix Ebre) y termina con una ruta nocturna buscando rapaces. No es fácil porque estos animales ‘trabajan’ de noche y la noche es oscura… pero con ganas, con el conocimiento del ornitólogo Yago Brugnoli y haciendo un poco de trampa, los búhos acabarán dejándose ver.

Pero empecemos por el principio. La primera parte del taller consiste en analizar las egagrópilas, que son las bolas indigeribles que algunas aves expulsan por la boca. Una bandeja con agua para cada uno, unas pinzas y todas las egagrópilas que un amante de los pájaros podría desear. Todas ellas están bien catalogadas porque saber qué expulsan estas aves da mucha información a los biólogos. “Pensábamos que la rata de agua se había extinguido en el Delta del Ebro pero gracias a las egagrópilas hemos podido ver que todavía hay”, explica Karin Van den Broek, bióloga de origen belga que vino a estudiar por unos meses al Ebro y se quedó a vivir. “¿Alguien sabría decir de qué pájaro es ese pico?”, pregunta Van den Broek mientras muestra lo que ha encontrado una de las asistentes al curso. Después de enumerar todos los pájaros que se nos pasan por la cabeza, da la respuesta: “Es un gorrión. Fijaos que es muy ancho. El resto de pájaros tienen el pico más delgado”, explica.

A las dos termina el taller y tenemos descanso hasta las 19.00, cuando toma el relevo en Brugnoli. Nos explica cuáles son las diferentes rapaces nocturnas que cazan entre los arrozales del Ebro y explica las características de cada uno. Lechuzas, autillos, búho común, búho chico y también el búho campestre, aunque en esta época del año no se encuentran. También nos enseña plumas que ha conseguido gracias al centro de recuperación de animales y nos enseña el curioso diseño que permite a estas aves volar sin hacer ningún ruido para coger a la presa desprevenida. A las nueve de la noche la claridad se va apagando. Ha llegado la hora de que todos estábamos esperando.

El primer avistamiento lo hacemos sin siquiera salir del pueblo. En una masía abandonada encontramos dos búhos comunes. Éramos 11 amantes de los pájaros sosteniendo los prismáticos para observar a los pequeños búhos en las afueras de L’Aldea. Parecía que ellos también nos observaran. Quien seguro que nos miraba eran los vecinos del pueblo que pasaban y veían la escena sin comprender mucho. Volvemos a los vehículos y hacia Deltebre, donde nos espera un gran espectáculo.

Mientras cenábamos en el Parc del Riu, el único momento del día que no estábamos pendientes de las rapaces, una preciosa lechuza pasó por encima de nuestras cabezas. Era como si, una vez más, las rapaces nocturnas nos estuvieran controlando. Su color blanco iluminó la noche y el movimiento tranquilo e incansable de las alas transmitía paz. Algunos ya habíamos visto más de lo que podías imaginar antes de empezar el taller.

Tras cenar hicimos una pequeña trampa. «Esta noche usaremos el reclamo pero no podemos abusar porque podemos molestar a los pájaros», dijo Brugnoli. El altavoz imitó el canto del autillo y enseguida obtuvimos respuesta. Después de buscar la pequeña rapaz entre las ramas de los árboles por fin la vemos. Todos en silencio. Disfrutando. Y llega la madre y con un movimiento suave se pone sobre la rama del álamo blanco junto a su hijo. Acerca el pico y le da de comer. Saciados y emocionados seguimos el camino buscando la lechuza que antes no nos dejaba cenar tranquilos. Volvemos a usar el reclamo para que el animal se deje ver y la luz blanca se vuelve a abrir camino desde la oscuridad y pasa un par de veces.

Ver a los animales salvajes tiene algo de especial. Mágico. Es como observar las llamas del fuego: podríamos estar allí toda la vida Unos jóvenes ebrenses empiezan a reunirse en el parque. Es sábado por la noche y tienen ganas de pasárselo bien. «Mira hay dos búhos», avisa uno de ellos a su compañero. Y los dos chicos se quedan mirando a los árboles, tranquilos. Incluso ellos, durante unos momentos, quedan embobados observando aunque sea de lejos ese espectáculo. Son las dos de la madrugada. Moto y hacia casa. A punto de llegar a Tarragona unas luces azules me obligan a regresar al mundo real. Control antidroga de los Mossos d´Esquadra.

“¿De dónde viene usted?”, pregunta el funcionario.

“No se lo creerá agente. Vengo del Ebro de ver rapaces nocturnas”, le digo satisfecho.

«¿Cómo dice?», pregunta.

“Rapinyaires nocturnos… búhos, lechuzas…”.

«Circule, va, va».

“El maltrato del caballo es una realidad que está absolutamente interiorizada en la sociedad como normal”

En la publicación de hoy entrevistamos a Leonor Díaz de Liaño, una mujer valiente, generosa, sonriente y genuina. Involucrada desde 1975 en la protección animal, ha denunciado prácticas crueles con los caballos que son tan cotidianas como desconocidas para la mayoría. La hípica debe ser repensada y mientras, ahí está la Asociación de Defensa de los Équidos (ADE) rescatando y devolviendo el alma a los caballos y otros animales que lo necesitan.

¿En qué se diferencia ADE de un santuario?

ADE podría ser declarado el primer santuario que se puso en marcha, al menos en Cataluña, porque la idea de estos espacios es la convivencia entre animales que necesitan un hogar de la manera más armónica posible. Pero la gran diferencia de ADE con un santuario es que nosotros damos animales en adopción cuando encontramos la familia adecuada.

La adopción de un animal conlleva llamadas, mails, visita previa y seguimiento de cada animal, pero esto nos permitió dar una segunda oportunidad a más de 2.000 équidos. A día de hoy tenemos acogidos 115 équidos y 200 animales más de otras especies.

¿Cómo influye en los animales la convivencia en libertad y sin más barreras que las necesarias para su seguridad?

La convivencia enriquece y es necesaria para animales que son básicamente gregarios.

«ADE nace de la tristeza que sentía al ver cómo los caballos pasaban de mano en mano hasta el matadero»

¿Qué te inspiró inicialmente a fundar ADE en 2001?

Honestamente, la tristeza que sentía al ver cómo los caballos pasaban de mano en mano siempre a peor destino hasta el matadero fue el motor de su fundación. ADE nació con la esperanza de salvar de su cruel destino al máximo de équidos posibles. Para ello decidimos dar animales en adopción pese a qué es mucho más trabajo que el de meramente salvar y acumular a unos cuantos en el refugio.

¿En qué momento dejó de ser en exclusiva un refugio para équidos?

Desde el inicio, ADE recogió a todos los animales que se ponían en nuestro camino sin importar la especie. Y cuándo se hacía un decomiso por maltrato, por supuesto vaciábamos el infierno. Nunca dejábamos animales atrás.

¿Cómo describirías el crecimiento y evolución de la asociación desde sus inicios hasta ahora?

El crecimiento de ADE fue sobre todo en número de animales rescatados, pues en cuanto a personal, por ejemplo, durante catorce años solo estuve yo como voluntaria a tiempo completo -y sigo-.

Después se incorporó mi hijo Aldo y actualmente nos ayuda también mi nuera que es veterinaria. El voluntariado en cuanto a redes sociales y apoyo es también fundamental y tenemos un equipo muy pequeño pero magnífico.

En la actualidad tenemos dos refugios: Molí de Fals y Cal Lari. Además, tenemos un par de proyectos. Liber ADE en Aragón que es un concepto precioso y también la colaboración con Innova Horse Care en los que la relación entre naturaleza, sostenibilidad y libertad de los caballos van de la mano más que nunca.

«Nuestro mayor logro ha sido sobrevivir pese a la falta de ayudas de ningún tipo»

¿Qué retos y desafíos han enfrentado a lo largo de los años?

El mayor reto y logro, hasta la fecha, ha sido conseguir sobrevivir pese a la falta de ayudas de ningún tipo y a la prácticamente nula respuesta de la sociedad, en general, hacia el maltrato del caballo, una realidad que está absolutamente interiorizada como normal y el desconocimiento/ indiferencia hacia su destino cuando no sirve.

¿Cuál ha sido el mayor logro de ADE hasta la fecha?

Nuestra voluntad y guía es visibilizar el maltrato a los équidos, que creo hemos conseguido. Incluso teníamos que luchar contra los propios «animalistas» que nos tildaban de pijos por defender a los caballos que presuntamente eran animales de lujo, e igualmente educar e informar sobre la necesidad de que la tenencia de cualquier animal se integre cómo miembro de la familia sin que sea solo una herramienta o un capricho.

«Es enorme la cantidad de animales que están en peligro de muerte en la calle o sitios infames»

¿Cuáles son los principios fundamentales que guían el trabajo de ADE en la defensa de los équidos y otros animales?

Mi motivación para encontrar hogar a los équidos y otros animales. Es enorme la cantidad de ellos que están en peligro de muerte en la calle o sitios infames, cómo perros, gatos y demás que no podemos absorber ya en nuestras instalaciones cómo por ejemplo con caballos mayores.

¿Qué medidas ha tomado ADE para adaptarse a los cambios y desafíos provocados por la sequía?

Hace ya tres años empezó a preocuparnos mucho este tema y después con la guerra de Ucrania y el alza de todos los productos, más.

Para preparar un plan de escape en el caso de que tuviéramos que realojar a los caballos por falta absoluta de capacidad de alimentarlos, iniciamos un proyecto «de prueba» el año 2022 de reintroducción de los équidos más fuertes a la libertad, en la Sierra de Santo Domingo en Biel, Zaragoza. Accedimos a esta posibilidad mediante subasta pública por un plazo de cinco años. De momento este proyecto sale muy caro, pero hemos aprendido que realmente los caballos pueden adaptarse siempre con supervisión.

¿Qué te motivó a centrar los esfuerzos de la asociación en rescatar y encontrar hogares para los équidos y pequeños animales?

Todas las adopciones en las que el animal ha quedado en buenas manos son nuestra inspiración, podríamos poner por ejemplo a Monky, un poni que permaneció durante años en una caseta de herramientas en un patio. Cuando lo rescatamos sus cascos eran literalmente ruedas pues habían girado sobre si mismos totalmente. Su adoptante pagó durante el resto de su vida a podólogos y fisioterapeutas para que Monky tuviera una vida plena, y lo consiguió.

«Desgraciadamente tenemos menos adoptantes de los que necesitamos»

¿Cómo se lleva a cabo el proceso de adopción de los animales rescatados por ADE?

El primer contacto con los aspirantes solemos tenerlo por mail o WhatsApp. Después concertamos una visita previa. Si todo puede ser positivo para la familia como para el animal firmamos un contrato de cesión y hacemos un seguimiento de por vida. Desgraciadamente tenemos menos adoptantes de los que necesitamos.

¿Cuál es el papel de la educación en la misión de ADE? ¿Cómo colaboran con la educación de los niños en relación con el respeto hacia los animales?

Siempre se aprende más con el ejemplo que con las charlas, pero obviamente es fundamental la divulgación. Colaboramos con institutos y escuelas de la zona, La Salle, SINS Cardener… para que sus alumnos realicen actividades en nuestros centros y conozcan de primera mano a los animales y sus necesidades.

¿Qué acciones concretas toma ADE para abogar por una mayor protección animal por parte de las Administraciones?

De las administraciones, en general, salvo excepciones, diría que carecen de empatía hacía nuestra problemática. Resulta agotador el contacto con políticos y técnicos que están sometidos a variaciones en sus cargos y responsabilidades lo que deja sin efecto promesas o acuerdos obtenidos después de meses o años de pedagogía. Les resulta más fácil seguir esa dinámica a Fundaciones que no tienen animales ni refugios a su cargo.

¿Cómo es la relación de colaboración con otras organizaciones y entidades en el ámbito de la protección animal?

La relación es en general buena, sobre todo porqué -no es por presumir- siempre estamos dispuestos a ayudar a quién nos lo solicita.

«Antes de ayudar a una organización de defensa animal hay que conocerla de primera mano»

¿Qué consejos darías a aquellos que desean contribuir a la causa de la protección animal?

Mi mayor consejo sería que antes de ayudar a una organización, la conocieran de primera mano si es posible. Desgraciadamente hay muchos casos de intrusismo y también de gentes sin preparación alguna que entran en este mundillo en busca de lucro o satisfacción personal, por desgracia.

Rescatar animales requiere conocimiento, tenacidad, honestidad y equilibrio entre lo que desearías y lo que puedes ofrecer. Obviamente hay gente maravillosa. Las entidades se han multiplicado en estos casi 25 años. Simplemente invito a que las personas con intención de ayudar se garanticen el éxito analizando de cerca en quién y qué invierten esfuerzos.

¿Cómo pueden las personas interesadas en apoyar a ADE contribuir o participar en su trabajo?

Intentamos que sea fácil para las personas que quieren ayudar desde hacerse voluntarios, socios, teamers, colaboradores, adoptar, apadrinar, lo que se quiera o se pueda.

Tenemos también una tienda solidaria en Facebook que nos montaron dos voluntarias y se llama Racó Solidari d’ADE. Estamos agradecidas por las ayudas sean grandes o pequeñas, sean inmediatas o de cara a un momento que se tenga más disponibilidad de tiempo, de medios o de capacidad de adopción.

En nuestra web está todo detallado también el contacto. Nuestra mayor necesidad es de ayuda económica y visibilidad. Necesitamos socios, padrinos, seguidores en rede sociales y que la gente conozca la problemática del caballo.

¿Qué mensaje te gustaría transmitir a aquellos que aún no son conscientes de la importancia de la protección animal?

Solo querría que reflexionaran en que la tierra no es nuestra. Ellos llegaron antes y nos han dado y siguen dando todo, incluida la vida, por ello querría que por lo menos a los animales se los respetara si es que no se los quiere amar.

Condena histórica por un delito continuado de maltrato animal a tres galgas en Jaén

La asociación Galgos 112 ha ejercido de acusación particular en un caso pionero tras la última modificación del Código Penal.

Condena histórica en España. El pasado 1 de abril de 2024, el Juzgado de lo Penal número 1 de Jaén dictó la Sentencia 112/2024, por la cual condenaba a un vecino de Torreperogil por un delito continuado de maltrato animal tras dejar a tres galgos sin comida ni agua.

«Valoramos esta sentencia de manera positiva dentro de la situación actual. Consideramos que hacía falta condenar cada delito de forma individual, ya que el maltrato se produjo sobre tres perras», declara para Animalados Cristina Bécares, abogada y mediadora especializada en Derecho Animal y una de las abogadas encargadas de asesorar y dirigir a Galgos 112 durante la acusación particular.

«Destacamos positivamente tres aspectos de la sentencia. Por un lado, se impone una pena de prisión y no de multa, que es lo que sucede habitualmente, por otro lado, valoramos el reconocimiento a la labor de la associación Galgos 112 en la Sentencia y, por último, condenar por maltrato y no por abandono», añade Bécares en relación a la sentencia del pasado 1 de abril.

Tres perras en une estado total de abandono y maltrato

Los hechos se remontan a diciembre de 2021, cuando una dotación de la Guardia Civil localizó a tres hembras galgas que estaban a cargo y bajo el cuidado del ahora condenado, en un estado total de abandono y maltrato. Según informa la asociación Galgos 112 los animales carecían de agua y alimento.

La entidad de defensa animal asegura que esta situación provocó en las tres perras un estado de desnutrición y deshidratación, presentando enfermedades parasitarias y requiriendo de tratamiento veterinario. Una de ellas presentaba un estado especialmente grave. De hecho, la situación pudo haber ocasionado la muertes de las tres en caso de no haber sido atendidas.

Asimismo, la ubicación donde se encontraban carecía de cualquier estándar mínimo de bienestar ni garantías higiénico-sanitarias, estando en una terraza a la intemperie, llena de heces y orines de los animales.

La asociación Galgos 112 ejerció como acusación particular

Tras tener conocimiento de los hechos, desde la asociación Galgos 112 se ejerció la acusación particular, bajo la dirección letrada de las abogadas especializadas en Derecho Animal, Cristina Bécares Mendiola y Núria Murlà i Ribot.

El pasado 1 de abril de celebró el juicio en el Juzgado de lo Penal número 1. Desde la entidad Galgos 112 se había interesado condena por tres delitos de maltrato animal, uno por cada una de la galgas que fueron víctimas de este delito, mientras que por el Ministerio Fiscal se interesaba condena por un delito continuado de maltrato animal y, por parte de la defensa la libre absolución o, de forma subsidiaria condena por un delito leve de abandono de animales.

Finalmente, la Sentencia ha condenado al vecino de Torreperogil como autor de un delito continuado de maltrato animal a la pena de un año de prisión con privación del derecho de sufragio pasivo por dicho tiempo e inhabilitación especial para la tenencia y el ejercicio, profesión o comercio que tenga relación con los animales por tiempo de tres años.

Además, el acusado tendrá que abonar a Galgos 112 la cuantía de 2.203,45€ por los gastos veterinarios y por los gastos derivados del mantenimiento de las perras y las costas procesales, incluidas las de la acusación particular.

Desde la entidad animalista destacan especialmente el agradecimiento que se realiza en la Sentencia: “Gracias a asociaciones como estas se ha podido salvar a las referidas galgas por lo que es ajustado que se fije una cantidad por los gastos que han tenido que llevar a cabo manteniendo a los referidos galgos”.

Una condena pionera y muy meritoria

Se trata de una condena meritoria, ya que desde la entrada en vigor del actual redactado del Código Penal, se prevé la imposición de penas de prisión o penas de multa, habiendo observado como en muchas de las resoluciones más recientes se opta por la pena de multa, reservando la de prisión para aquellos casos más graves.

A fecha de hoy, la Sentencia no es firme. La asociación Galgos 112 advierte que en caso de que ésta sea recurrida ante la Audiencia Provincial, deberemos esperar a ver el fallo en segunda instancia a fin de poder tramitar la ejecución de la Sentencia y, en caso de confirmarse la misma, por parte de las letradas de Galgos112 -Bécares y Murlà- se interesará la entrada en prisión.

Actualmente, gracias a la labor y los cuidados de la asociación de defensa animal, la tres galgas (Ariel, Tundra y Esmeralda) se encuentran en buen estado, recuperadas y conviviendo con sus nuevas familias en Barcelona y Alicante.

Diez libros de animales que no te puedes perder

Si os gustan los animales y sois de devorar libros, estáis de enhorabuena. En las librerías y bibliotecas existen auténticas maravillas que tratan sobre los animales: se pueden encontrar muchísimos manuales y también obras literarias que giran en torno a nuestros grandes amigos. En este artículo presentamos diez libros que a los periodistas de Animalados nos han marcado de alguna manera. Si echáis de menos alguno, envíadnos un comentario y así haremos una lista más completa.

El arte de conducir bajo la lluvia Garth Stein
“Te presentaré una teoría: el pariente más cercano del hombre no es el chimpancé, como creen los de la televisión, sino, de hecho, el perro.” Esta es una de las muchas reflexiones de Enzo que es un perro, de raza Golden retriever, del que es imposible no enamorarse. Aprovecha sus últimos días para hacernos testigo de la vida de su dueño, Denny Swift, un piloto de carreras, y de su familia. Esta perspectiva canina proporciona una visión sabia y emocional sobre los eventos de la historia y las relaciones entre los personajes. «El arte de conducir bajo la lluvia» aborda el amor, la lealtad, la pérdida, la superación y el propósito en la vida. La historia de Denny y Enzo está llena de giros emocionantes y momentos conmovedores que tocan la fibra. Dudamos mucho que en los ejemplares en papel no queden marcas de las lágrimas derramadas a lo largo de la lectura. Si lees a través de la Tablet… ponle un protector. El “arte de conducir bajo la lluvia” está alcanzando el reinado de los otros dos grandes dramas con perro de la literatura y cinematografía popular.

Marley y yo John Grogan
Marley y yo es una novela que trata sobre las aventuras y desafíos de tener un cachorro, en este caso, un travieso y adorable labrador llamado Marley. La relación entre Marley y su familia humana está llena de momentos divertidos, cómicos y a veces desafiantes, lo que permite identificarse o reírse de los personajes y sus experiencias. Como viene siendo obligatorio en este tipo de literatura se comparten reflexiones sobre temas universales como el amor, la amistad, la lealtad, el sacrificio y la importancia de vivir el momento presente. A través de las travesuras y sinsabores de Marley, Grogan transmite mensajes sobre la importancia de valorar las relaciones humanas y aprender a apreciar cada momento que compartimos con nuestros seres queridos. Marley y yo invita a celebrar la conexión especial que podemos tener con ellos y nos recuerda la alegría que traen a nuestras vidas, incluso en medio de los desafíos que puedan presentar. También exige tener los kleenex a mano. La película con Jennifer Aniston y Owen Wilson fue tal éxito que tuvo una secuela.

Hachiko, El perro que esperaba Lluis Prats
Otra catarata emocional y lacrimógena pero imperdible es «Hachiko». La historia está basada en un perro real llamado Hachiko, que se convirtió en un símbolo de lealtad impactante. Hachiko fue un perro nipón que esperó fielmente a su humano, un profesor universitario, durante años, a pesar de que este dejó súbitamente de acudir a su cita cotidiana. En Japón, Hachiko es considerado un símbolo de fidelidad y lealtad, y su estatua en la estación de Shibuya en Tokio es un lugar de encuentro popular y un símbolo de la ciudad. La insistencia del animal y la fortaleza del vínculo que creó con su humano nos invita a reflexionar sobre la conexión especial que podemos tener sin discriminar la especie y sobre la responsabilidad que tenemos como seres humanos de cuidar y proteger a aquellos que dependen de nosotros. «Hachiko» es una historia que toca el corazón y deja una impresión duradera en quienes la leen. La versión para la pantalla de la historia real la filmó en 1987 Seijirô Kôyama con el nombre de «Hachiko monogatari». En 2009 se lanzó la versión norteamericana con Richard Gere como protagonista.

Diario de un Refugio, José Fonollosa
Un libro del que nos habló su autor en una entrevista y que nos gustó especialmente porque es la crónica ilustrada, emotiva, pedagógica y honesta de una realidad que entre todos podemos cambiar. José Fonollosa en el “Diario de un refugio” nos cuenta con ternura y simpatía qué es incorporarse como voluntario en una protectora y cómo son los perros que están allí esperando una familia. «Diario de un refugio» es una obra escrita por José Fonollosa, que ofrece una mirada íntima y sincera sobre la vida en un refugio de animales. A través de las páginas de este diario, el autor comparte sus experiencias, reflexiones y emociones mientras trabaja como voluntario en un centro de acogida para mascotas abandonadas.
Este libro es una ventana hacia el mundo de los refugios de animales, mostrando los desafíos, las alegrías y las tristezas que acompañan a quienes trabajan diariamente para cuidar y proteger a los animales necesitados. Desde historias conmovedoras de rescate y adopción hasta momentos de frustración y agotamiento, «Diario de un refugio» ofrece una visión completa, sin edulcorar y sin exagerar de la realidad detrás de las puertas de estos lugares. «Diario de un refugio» es una lectura conmovedora y edificante que ofrece una visión auténtica y reflexiva sobre el trabajo en los refugios de animales. Es un libro que puede inspirar acciones positivas y sensibilizar a los lectores sobre la importancia de proteger y cuidar a nuestros amigos peludos. De lectura obligada para todas las personas que sean voluntarias, hayan pensado en serlo, lo hayan sido y para quien haya adoptado o quiera ampliar la familia.

Un perro, Alejandro Palomas Ediciones Destino
«Un perro» es un relato conmovedor. En él Alejandro Palomas nos sumerge en el estrecho vínculo entre un hombre y su perro, pero va más allá. El autor es conocido por su sensibilidad, por denunciar públicamente unas vicisitudes personales ocurridas en su infancia y como el amor a su madre y a los animales le ha insuflado vida. Un perro nos da la oportunidad de reconocer como los seres con los que convivimos siendo de otras especies e inocentes nos ayudan a afrontar y a afrontarnos. Junto, delante, atrás, sobre y tras los perros modifican muchas veces las relaciones. Alejandro Palomas escribe de una manera envolvente y nos regala en una historia que nos hace reír, llorar y reflexionar sobre la vida y las conexiones que nos unen a quienes amamos.

Flush, Virginia Wolf
«Flush» es una biografía imaginaria del perro de la poeta Elizabeth Barrett Browning. La historia está narrada desde la perspectiva del perro, Flush, y sigue su vida desde su nacimiento hasta sus aventuras junto a Elizabeth Barrett Browning. Usar la identidad del perro permite a Virginia Wolf exponer una mirada poco convencional a la vida y el mundo social de la época victoriana. Como muchos otros escritores que salvan las fronteras de la especie, Wolf reflexiona sobre la relación entre humanos y animales, así como sobre la naturaleza de la conciencia y la experiencia animal. «Flush» muestra el talento de Wolf para la experimentación literaria, ya que utiliza técnicas narrativas innovadoras para explorar la mente y las emociones de un perro, lo que añade una capa de complejidad y profundidad a la historia. Está muy bien como ejercicio para que los lectores exploren su propia capacidad para pensar fuera de ellos mismos y más como los animales con los que convive.

Rabia, Sebastià Alzamora
Rabia es el título de una novela del autor mallorquín Sebastiá Alzamora. Es una novela en la que la relación con Taylor la perra es especial, y nada nada noña. Fuera de muchos estereotipos, incluido los de final feliz la historia también explora la soledad del hombre y la naturaleza efímera y a menudo cruel de las relaciones humanas en un entorno turístico degradado. Más allá del escenario y de los acontecimientos el protagonista encuentra destellos de belleza y auténtica amistad, lo que le lleva a reflexionar sobre su relación con el mundo y a encontrar cierto consuelo en medio de la tragedia. En resumen, el perro en «Rabia» no solo es un compañero para el protagonista, sino también un catalizador para la exploración de muchas otras cuestiones.

El darrer dia, Jordi Coca, Edicions 62
“El darrer dia” es la historia de un gato que la cambia la vida a un famoso autor de teatro y a su mujer una vez lo rescatan de las calles del pueblo donde veranean. Es un libro no muy extenso, pero es muy honesto explicando el proceso por el que dos ignorantes totales, en lo que a lo felino respecta, acaban más sabios y enamorados. Núvol, nube en catalán, supera con nota la torpeza de sus dueños compensada por su buena intención. Esta convivencia relativiza todo: el valor del tiempo, las emociones, la comunicación y el amor. Los urbanitas y el mundo rural, lo intelectual y lo emocional, la libertad y el confort, los prejuicios y la realidad más sencilla. El gato, con su dignidad y observación constante, se convierte en un milagro que cambia al narrador y haciéndole a el y a quien lo lee más humano.

¿Qué hace tu gato cuando tú no estás?, Laura Joffe Numeroff e ilustrado por Lynn Munsinger.
Muy divertida crónica de una espía que narra las travesuras de un gato mientras su dueño está fuera de casa. Un incidente inesperado pone en bandeja la posibilidad de descubrir aspectos insospechados de un gato en un hogar neoyorquino. La historia está llena de situaciones inesperadas que el gato protagonista experimenta en ausencia de su humana. El libro estimula la curiosidad de los lectores al explorar las posibles actividades que los gatos podrían hacer cuando no están bajo la supervisión de sus titulares. Las ilustraciones de Lynn Munsinger aportan enormemente a la narrativa un atractivo indiscutible. Van más allá de la captura de la personalidad y las travesuras del gato de manera vívida y humorística. Las imágenes coloridas y detalladas valdrían la pena por ellas mismas. A través de la historia, los lectores pueden conectar con la curiosidad y la travesura propia de los gato. Permite también comprender mejor el comportamiento de estos adorables animales y analizar nuestras carencias como compañeros siempre mirándonos al ombligo y olvidando que existen otros puntos de vista que merecen ser atendidos. Es un libro breve, alegre, divertido, pero también esconde alguna verdad que a la que debemos mirar con honestidad y compasión.

La llamada del bosque, de Jack London. Libro clásico que tiene la gran virtud de poder seducir desde niños hasta adultos. La obra, escrita por el autor californiano Jack London (1876 – 1916), trata sobre un perro de ciudad que, en contra de su voluntad, es trasladado a Alaska para trabajar como perro de tiro. El animal sufre y comienza a perder la fe en los seres humanos. Buck, así se llama el perro, se debate entre seguir siendo perro y obedecer las órdenes de los humanos o escapar y volver al bosque, recuperando sus orígenes ancestrales. Dejar de ser doméstico y volver a ser un animal salvaje. La llamada del bosque es cada vez más intensa, pero también hay motivos para seguir junto a los humanos. Y es que también existen buenas personas. Aunque el libro fue escrito hace más de 120 años, no os diremos cómo acaba. Podéis encontrarlo en inglés o traducido a cualquier idioma. Pero no os perdáis.